Los códigos de un contenedor marítimo tienen que seguir unas pautas para que se consideren válidos en las aduanas de salida y entrada. El artículo indica cuál es la información que tiene todo contenedor y la manera de interpretarla. Finalmente, se indicará por qué contratar a un transitario.
¿Cómo interpretar los códigos de un contenedor marítimo?
Los códigos de un contenedor marítimo están regulados por la normativa internacional ISO 2716 que estandariza la información e indica los códigos comunes. Es fundamental poder separar cada información para hacer una lectura correcta. Los datos que tienen que constar son los siguientes:
1. Logotipo de la empresa
El logotipo de la empresa aporta la información sobre la compañía que envía la mercancía y es imprescindible facilitar una identificación. Estos datos consiguen esa identificación y, por eso, se suele reclamar su inclusión.
2. Sello de certificación
El sello de certificación sirve para dar fe de que el contenedor cumple con la normativa de sellado de contenedores. Esta marca suele proceder del país de origen y, en ocasiones, el país de destino puede pedir más información. La normativa ISO 17712 es la que regula los precintos.
3. Código del propietario
El código de propietario consta de cuatro letras y se puede consultar en el BIC (Bureau International du Container), la oficina reguladora mundial con sede en Francia. Esta es la única referencia válida para cada propietario, de manera que será fácil conocer la procedencia.
Lo cierto es que la última letra del código es casi siempre la U, aunque hay excepciones en contenedores que no sigan la normativa ISO. Sin embargo, es importante señalar que es posible que este dígito cambie en el futuro.
4. Número de serie
El número de serie es un código numérico que consta de seis cifras que no tienen por qué guardar ningún orden. Los propietarios eligen el que consideren oportuno, con la condición de que sea único. Si un propietario tiene más contenedores a su nombre, tendría que elegir un número de serie diferente para cada uno de ellos.
Los números de serie serían el símil a las matrículas de los coches. No en vano, suponen una marca única e irrepetible para cada propietario. Esto reduce el fraude y las operaciones dudosas.
5. Dígito de control
El dígito de autocontrol es un único caracter que se calcula mediante un algoritmo. Esta información es especialmente importante para comprobar que el número de serie y la serie son los adecuados.
El objetivo final de este dígito es la persecución del fraude y, sobre todo, comprobar que el número del contenedor es el correcto.
6. Dimensiones y propiedades del contenedor
El cálculo de las dimensiones y propiedades del contenedor es fundamental para gestionar correctamente la expedición desde el país de origen. Estos números permiten conocer fácilmente determinados datos del contenedor.
Este código tiene cuatro dígitos; el primero sirve para calcular la longitud, el segundo para la altura y los dos últimos se refieren a circunstancias especiales y concretas del contenedor.
7, 8, 9 y 10. Peso
El peso es una variable fundamental para aplicar tasas e impuestos. Hay dos medidas que es obligatorio hacer constar en todos los contenedores, la Masa Bruta Máxima (M.G.W) y la tara, que se tienen que calcular en libras y kilogramos. La M.G.W. representa el peso máximo que puede albergar el contenedor. El cálculo de la tara se refiere al peso en vacío.
Hay dos medidas que son voluntarias, aunque recomendables, el volumen interno y el peso neto. El volumen interno se refiere a la capacidad interna en pies y metros cúbicos. La medida de peso neto indica el peso que se puede cargar.
11. Placas CSC-CCC
La legislación internacional exige una serie de garantías para el transporte de contenedores, de ahí que se dé especial importancia a las placas CSC-CCC. El principal objetivo de esta información es eminentemente garantista.
La placa CSC acredita que el container cumple con las directrices Container Security Convention de seguridad del contenedor y permite transportar mercancía peligrosa. Las placas CCC incluyen datos sobre el cumplimiento de la normativa aduanera internacional.
¿La normativa de contenedores marítimos es homogénea en todo el mundo?
Los datos básicos obligatorios son exigibles en todo el mundo debido a la normativa ISO 2716. Eso sí, también conviene indicar que algunos países exigen datos adicionales. Lo cierto es que Estados Unidos, por ejemplo, cuenta con una normativa más restrictiva para la recepción de contenedores.
En la práctica, una PYME no debería dedicarse al comercio marítimo sin un transitario que le pueda dar orientación. En primer lugar, porque es más económico. Por otra parte, las autoridades aduaneras pueden pedir más datos y, por ello, es imprescindible conocer cómo se trabaja en cada país.
La información sobre los datos de los contenedores marítimos permite entender cuál es la nomenclatura oficial. Esta información siempre es útil para no empezar de cero cuando se quiere comerciar.
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