Es bien sabido que el despacho de aduanas es el conjunto de trámites y operaciones que se realizan en un recinto aduanero para poder controlar, supervisar y autorizar la entrada o salida física de las mercancías dentro de un territorio concreto. Y la mayoría de comerciantes teme el canal rojo.
Su procedimiento consiste principalmente en declarar la información relativa a todo lo relacionado con la importación y exportación de una mercancía frente a la autoridad aduanera.
En este sentido, caben destacar tres requerimientos importantes: la factura comercial del vendedor, los documentos de embarque y el packing list donde se detallan los datos de la mercancía.
Protocolo del despacho de aduanas
El despacho de aduanas cuenta con un representante como figura que se encarga de realizar las gestiones oportunas. Este representante presenta la declaración de las mercancías y, la aduana, a través de los medios informáticos será la encargada de contestar asignando un canal que etiqueta el riesgo y necesidad de inspección de esta mercancía.
- El canal verde supone un levantamiento y autorización inmediata de la mercancía.
- El canal naranja implica la comprobación de todos los datos que figuran en la declaración y concordancia con los documentos aportados en esta. Cuando se comprueban, se expide el levante correspondiente.
- El canal rojo implica un reconocimiento físico de la mercancía por parte de la aduana y se verifica que los datos y documentos que se aportan concuerden con la mercancía que se describe.
Cuando se realiza la comprobación y se considera conforme es el momento en que se procede a levantar la mercancía. Realmente, esto puede implicar retrasos en el transporte y los costes adicionales por el posicionado de la mercancía en el Punto de Inspección Fronterizo (PIF).
Si bien cabe destacar que la mayoría de la mercancía pasa por el denominado circuito verde, hay que tener en cuenta que existen importaciones que deben ir acompañadas de documentación especial.
La mercancía en el canal rojo
¿Qué ocurre cuando una empresa compra unas mercancías a un proveedor extranjero y al llegar a la aduana entran en el canal rojo?
Normalmente, la empresa acuerda con el vendedor que se deben entregar unas mercancías en el puerto de destino dentro de una fecha determinada. Aunque, el proveedor ha cumplido el plazo de la entrega que se acuerda, el agente comunica la retención de la mercancía al asignar el temido canal rojo.
En este caso aduanas revisa la documentación e inspecciona físicamente la mercancía (para ello, se abre el contenedor, se extrae la mercancía para inspeccionarla y después se vuelve a llenar el contenedor). Si todo está en orden pasa al canal verde.
¿Cómo se debe actuar?
- Control. Aunque la persona actúe correctamente y disponga de la documentación, siempre hay riesgo de que la mercancía entre en el canal naranja o rojo. Aún así, se pueden tomar algunas cautelas para reducir los perjuicios si al final la mercancía se ve afectada.
- Plazo. Antes de negociar con el vendedor el plazo de la recepción, se debe tener en cuenta que la mercancía puede demorarse y es mejor añadir algunos días de margen adicionales.
- Documentación. Antes de importar el producto se debe consultar con el agente de aduanas qué tipo de documentos son necesarios para realizar el despacho aduanero. Debe tenerse en cuenta que hay que exigir la documentación al vendedor y dejar por escrito que colaborará enviando la documentación adicional.
- Gastos. Si se entra en el canal rojo, además de demoras se pueden generar gastos por traslado, vaciado y llenado de contenedor.
De forma resumida hay que destacar que el canal rojo significa que aduanas revisará, documentará e inspeccionará la mercancía, una circunstancia que comporta demoras y gastos adicionales.
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